Incluso hoy en día Nurburgring tiene un encanto especial, pero en su época dorada cuando los Fórmula 1 disputaban en el infierno verde el Gran Premio de Alemania tenía que ser algo realmente espectacular.
No podemos volver a los años sesenta, pero gracias al vídeo nueve minutos que he encontrado del G.P. de Alemania del 67 podremos rememorar aquellos gloriosos años en los que en coches que hoy en día nos parecen de juguete los pilotos volaban por la selva negra.